miércoles, 3 de julio de 2013

Pastor Héctor Nufio



IGLESIA APOSTÓLICA


Muchas veces la interpretación que tenemos de los nombres o títulos, la obtenemos del contexto en el cual nos movemos y no en el contexto en el cual éste fue dado. Usualmente el pensamiento de “ancianato” está siendo influenciado por una teología cultural, por nuestra relación de costumbre a los títulos y posiciones y a veces porque pensamos más en privilegios que en responsabilidades.  Por eso es necesario que vayamos a la Biblia y busquemos el contexto en donde se habla de estos títulos viendo el contexto hebreo y no el griego.  Nadie puede conocer al Señor Jesucristo como su Salvador personal sin comprender antes el contexto hebreo, recordando siempre que no somos ni judíos, ni gentiles, sino somos el Israel de Dios. Pero para tener un mejor entendimiento, debemos de ir al Antiguo y Nuevo Testamento. De lo contrario podemos caer en falsas doctrinas como la “doctrina de la sucesión”.  La palabra sucesión en el ambiente en el que estamos se refiere más a una silla, a alguien que toma una posición o una responsabilidad, pero lo curioso es que esta persona que toma el  lugar tiene autoridad absoluta en lo que va a declarar; cuando lo importante de la sucesión no es la silla sino la misión, por eso es que en lo personal, creo más en relevos, porque éste representa el esfuerzo de cumplir la misión.  El que queda en la silla lo puede cambiar todo, pero el relevo más bien, toma la misma misión, corrigiendo lo que se hizo tal vez no de forma correcta.  Debemos tener claridad en que no se trata que nosotros utilicemos el Nombre de Jesús  para hacer cosas, sino que nos use a nosotros y así nos sea aclarada la mentalidad de que somos siervos.


El “ancianato” no es un grupo que manda o gobierna en sentido de privilegio, sino demanda madurez obtenida a través de la experiencia y del trabajo realizado, demanda sufrimiento y tiene que ser alguien que haya acumulado para dejar herencia.  El anciano es UNA FUNCIÓN EN EL CUERPO LOCAL.  Un pastor es un anciano reconocido en su ministerio; éste no manda como privilegio, sino lo hace sirviendo.  


Otro concepto con el cual debemos tener cuidado es el “Ministerio Apostólico” porque estamos enfatizando que el “apóstol” es una persona y no enfatizamos a qué lo mandaron a hacer y cuidar.  Es vital entender que el centro de atención de una iglesia no debe ser ni el pastor, ni el apóstol, ni de evangelista, ni cualquier otro ministerio ya que la forma en que se reconoce una verdadera Iglesia Apostólica es que ésta esté operando y no el ministro. Nunca dejemos que la iglesia ponga sus ojos única y exclusivamente en el ministro. En el Ministerio Apostólico lo importante debe ser la iglesia y lo que estamos edificando.


Y Él mismo constituyó a unos apóstoles, a otros profetas, a otros evangelistas, y a otros pastores y maestros.
Efesios 4:11


En este verso podemos ver un énfasis de responsabilidad.  Qué privilegio que el Señor nos haya llamado a ser parte del Ministerio Quíntuple.  Pero ¡Cuidado! Porque vamos a ser juzgados por lo que sigue:


A fin de capacitar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del Cuerpo de Cristo.
Efesios 4:12


Por eso es necesario enfatizar que debemos activar a la gente.  Pero ¿Cómo podemos saber si estamos logrando esto?  


Esto, para que ya no seamos niños, sacudidos a la deriva y llevados a dondequiera por todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar, emplean con astucia las artimañas del error; sino que, siguiendo la verdad con amor, crezcamos en todo hacia Aquel que es la Cabeza: Cristo.
Efesios 4:14-15


¿Estamos perdiendo gente en nuestras congregaciones por artimañas del enemigo? No se trata de tener una iglesia grande o una buena paga sino lograr que el pueblo madure. No busquemos comodidad, Cristo nos llamó a enfrentar las tinieblas y establecer una casa que fuera madura, que pueda discernir las doctrinas.  Según el contexto en donde nos movemos, hay una descripción érronea de lo que es la verdadera iglesia apostólica:

     .       SANTA
     .       UNIVERSAL
     .       APOSTÓLICA (TIENE PENSAMIENTO DE SUCESIÓN)
     .       ROMANA


Esta descripción enfatiza a una persona por encima de todos, porque aquí no hay un concepto claro de lo que es ancianato. Sin embargo, una iglesia apostólica no lo es porque tiene apóstol sino porque tiene la misión apostólica.  Estamos regresando a muchas doctrinas que no solamente son peligrosas, sino que ni estamos seguros de ellas y las presentamos como verdad total.  Por eso es necesario que exista un ancianato.  


Entre tanto, los que habían sido esparcidos a causa de la tribulación que sobrevino en tiempos de Esteban fueron hasta Fenicia, Chipre y Antioquía, sin comunicar la Palabra a nadie, excepto sólo a los judíos.
Hechos 11:19


¿Por qué eran dirigidos sólo a los judíos?  La misión de Dios no era el judío solamente y por eso Dios levantó a un apóstol que representara a los gentiles porque era necesario que comprendieran que para aceptar a Cristo no debían convertirse en judíos como pensaban los doce apóstoles.


La mano del Señor estaba con ellos, y un gran número que creyó se convirtió al Señor. Llegaron noticias de estas cosas a oídos de la iglesia que estaba en Jerusalén, y enviaron a Bernabé para que fuese hasta Antioquía. Cuando él llegó y vio la gracia de Dios, se regocijó y exhortó a todos a que con corazón firme permaneciesen en el Señor; porque Bernabé era hombre bueno y estaba lleno del Espíritu Santo y de fe. Y mucha gente fue agregada al Señor.
Hechos 11:21-24


Podemos preguntarnos ¿Cristo abolió la ley representada en ordenanzas? La respuesta es que no, sino que abolió las ordenanzas que fueron puestas como ayos para obedecer la ley.  Hoy en día diezmamos no por ordenanza sino porque estamos agradecidos con Dios y le amamos.


La razón por la que había ordenanzas, era porque aquel que daba la ley estaba bajo ella (Moisés) así también la razón de que las ordenanzas no tienen valor ahora, es porque Aquel que la da, está por encima de la ley y es Jesucristo. 


Debemos tener claro que una Iglesia Apostólica tiene una misión y es la misma del Señor Jesucristo:  Predicar el Evangelio para que sean salvos. Una verdadera Iglesia Apostólica es Cristo-céntrica.  Detengámonos para preguntarnos ¿Cómo son nuestros mensajes? ¿Llamativos o presentamos a Cristo?  Ni siquiera los problemas, nos deben quitar el énfasis en Cristo. En Antioquía no se convirtieron al cristianismo ni al judaísmo sino a Jesús.  

Y sucedió que se reunieron todo un año con la iglesia y enseñaron a mucha gente. Y los discípulos fueron llamados cristianos por primera vez en Antioquía.
Hechos 11:26


Fueron llamados cristianos por lo Cristo-céntricos que eran.  Si no evangelizamos y no leemos la Biblia, no  nos pueden llamar evangélicos. Un Ministerio Apostólico tiene que ser evangelista; si dejamos de leer la Palabra, perdemos el hacer evangelismo y comenzamos a orar sólo cuando nos conviene. Ellos fueron llamados cristianos porque predicaban a Cristo, su énfasis era Cristo, todo era al respecto de Jesucristo.  


Había entonces en la iglesia que estaba en Antioquía, unos profetas y maestros: Bernabé, Simón llamado Níger, Lucio de Cirene, Manaén, que había sido criado con el tetrarca Herodes, y Saulo. Mientras ellos ministraban al Señor y ayunaban, el Espíritu Santo dijo: "Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a la que los he llamado."
Hechos 13:1-2


La Iglesia Apostólica tiene que ser MULTI-ETNICA:  El enfoque tiene que ser pobres, ricos, de todas las edades.  Una iglesia que tiene enfoque solamente en un sector, causa divisiones.  Nuestro enfoque es predicar al Evangelio a toda criatura.  


Una Iglesia Apostólica deber ser UNA IGLESIA DE MINISTRACIÓN AL SEÑOR: Hacerlo todo para Él. Cambiar nuestra vida para el Señor.  Restaurar nuestros matrimonios, hogares, etc.


Una Iglesia Apostólica deber ser PROFÉTICA: La profecía es dada para exhortar, consolar, edificar y la Iglesia Apostólica es aquella que hace lo mismo. El que profetiza debe hacerlo corpóreamente recordando que no es el ministerio lo que importa sino el efecto en la iglesia.  


Una Iglesia Apostólica  ES MAGISTERIAL y debe DESARROLLAR MINISTERIOS: Aquél que recibió el apostolado tiene responsabilidad hacia Jesús y hacia aquellos a quien fue dado porque tiene que desarrollarlos.  En Antioquía fueron desarrollados a capacitar, los enseñaron a ser santos, a edificar, a que buscaran la unidad de la fe, a que conocieran bien al Hijo de Dios, a madurar y a no ser niños sacudidos por cualquier doctrina.